Era tan tonto que se creía un genio y tenía tanto miedo de que el mundo copiase sus ideas que dejó de compartirlas. Empezaron a agolpársele en la cabeza y notaba que, contra su voluntad, a veces se le escapaba alguna al bostezar o al hablar. Decidió entonces cerrar para siempre la boca y la puerta de su casa hasta que un día, mientras comía patatas cocidas, sintió que las ideas descendían, como arañitas con vida propia, atravesando músculos y terminaciones nerviosas, hasta llegar a mezclarse con el bolo alimenticio que estaba masticando. Y es así como se destruyeron trituradas, junto con la masa de patatas, una a una, todas las ideas de este pobre hombre, hasta acabar ya sabemos dónde.
lunes, 15 de diciembre de 2014
martes, 9 de diciembre de 2014
La operación.
Se lo diré al cirujano, es mi única oportunidad:
- Lo tengo ahí desde niña, ¿sabe? Para usted sería muy fácil, es un nudo, sólo tiene que arrancármelo, está aquí, en el pecho, y me sube a veces hasta la garganta. Desde niña lo tengo…
El hombre desinfectado ignora mis palabras, lo escucho hablar desde detrás de la mascarilla pero no me habla a mi. Veo guantes de látex, batas esterilizadas, todo huele a plástico, me tapan la boca, el nudo seguirá ahí, ya no puedo decir nada más, cuento hacia atrás; diez, nueve, ocho, siete…
lunes, 1 de diciembre de 2014
El escritor.
Esa misma mañana, harto de no entender de dónde salían las palabras, cansado de ser el negro de no sabía quién, decidió trazar un plan estratégico para asesinar vilmente al apuntador que vivía en su cabeza.
martes, 25 de noviembre de 2014
El columpio.
Mi amiga y yo subimos al columpio y empezamos a mover las piernas; estiramos, flexionamos, estiramos, flexionamos. Ya nos movemos, el aire nos alarga la boca en una amplia sonrisa, me giro y la veo feliz, con los ojos cerrados y el pelo revuelto que viene y va tapándole la cara por momentos. Ahora estamos balanceándonos en este columpio oxidado y miramos al cielo y al suelo, al cielo y al suelo, al cielo y al suelo y nos sentimos tan bien juntas en este sube y baja que no importa si nos toca estar arriba mirando el cielo o abajo mirando el suelo.
lunes, 24 de noviembre de 2014
Qué sé yo.
Leía con ansia todo lo relacionado con el ser humano hasta que un día se miró espantado al descubrir que no había nada escrito sobre él.
lunes, 10 de noviembre de 2014
Margaritas hasta que me quiera.
Me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere.
Me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere.
Me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere, me quiere.
lunes, 3 de noviembre de 2014
Fin de la infancia.
Ya eres una mujer, me dijo mamá.
Corrí ilusionada a mirarme en el espejo y me asusté al ver una niña tan asustada.
Corrí ilusionada a mirarme en el espejo y me asusté al ver una niña tan asustada.
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